

Como mujer y madre de familia fui sorprendida durante el año 2017 con el anuncio del decreto No. 40422 del gobierno PAC de Luis Guillermo Solís Rivera que indica que el sexo de los niños al nacer no es biológico, y además por el anuncio de nuevos programas de educación sexual que impartiría el Ministerio de Educación Pública para el siguiente año, programas que conocí a profundidad cuando los estudié en noviembre 2017.
Ante estas situaciones y muchísimas otras que afectaban al país, entendí que al acercarse la campaña presidencial 2018 era necesario un voto pro vida y profamilia, y me di a la tarea de buscar un partido político que además de plantear una propuesta nacional también representara firmemente los principios y valores cristianos en los que creo, un partido político que defendiera a los niños, a los jóvenes y a la familia, un partido político que respetara mi fe cristiana católica.
Si bien había apoyado a diferentes partidos políticos en años pasados, nunca había sentido ese llamado tan profundo en mi corazón de participar en política como en esta ocasión que era tan palpable que el gobierno PAC de Solís buscaba sacar a Dios y a la biología de todo lado posible, y adoctrinar a los niños y jóvenes en ideologías extranjeras mediante el propio sistema educativo nacional.
Para diciembre 2017 encontré la opción política que buscaba en Restauración Nacional y decidí participar activamente. De manera oficial llegué al partido el 08 de enero 2018, justamente un día antes de que se conociera en el país la resolución de la Corte Interamericana de Derechos Humanos sobre el matrimonio igualitario lo cual causó un gran impacto nacional.
Así que entonces colaboré activamente con Restauración Nacional en la primera ronda donde disfrutamos con muchísima alegría la victoria que celebramos el 04 de febrero por la noche en el parque de Ciudad Quesada y fue ahí en el Kiosko del parque que ofrecí unas palabras, de previo a don Francisco Jiménez el presidente del partido, para agradecer a todos los colaboradores y gente linda que estaba celebrando con sus banderas y con la música de la cimarrona de fondo.


En la segunda ronda, continué mi trabajo activo en el partido compartiendo hermosas experiencias con gente maravillosa y tuve una pequeña participación en la plaza pública el 18 de marzo 2018. En esta ocasión perdimos la campaña nacional entendiendo que había mucho más por hacer para el bienestar del país y de las familias costarricenses, y para lograr el cambio que requiere y urge en Costa Rica.
